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5 sept 2012

El Juicio de París...





Mª José me encargo su libro de firmas para su boda y le encanto esta tela que siempre me recuerda la historia que en el mundo de los vinos se llamo El Juicio de París.

Etiquetas de vino francesas se mezclan con americanas...










Y esta historia, comienza con el apasionado ingles Steven Spurrier que se mudó a París en 1970 donde convenció a una anciana que le vendiera su pequeña tienda de vinos.    

En 1971, Spurrier inauguró su nueva cava con el nombre de Les Caves de la Madeleine.  Una de las particularidades que distinguían a su cava de otras, fue que los clientes eran invitados a degustar los vinos que compraban.  La popularidad de su cava creció a tal medida que muy pronto fue reconocida como una de las cavas de mayor prestigio en París.  

Viendo la complejidad de los vinos de Francia y de las diferentes zonas productoras, decidió abrir  la L’Academie du Vin, la primer escuela privada de vino en Francia.  No solamente era la primera escuela privada de vinos, sino que además, era la primera escuela de este género en Francia dirigida por un extranjero.









Spurrier pasó gran parte de su tiempo en Francia recorriendo vinícolas de diferentes zonas productoras por lo que tuvo que contratar a Patricia Gallagher para que lo ayudara con su cava y la escuela de vinos.  En la cava se dedicaban a comercializar únicamente vinos franceses, por lo que constantemente ideaban eventos viniculturales con la idea de promocionar los vinos de diferentes bodegas francesas. 










En 1976, el año del bicentenario de la independencia de Estados Unidos, a Spurrier se le ocurrió realizar un concurso entre vinos franceses y vinos americanos.  Este evento tenía como fin promocionar la cava de Spurrier y por supuesto los vinos Franceses, por lo que envió invitaciones a nueve personalidades del vino y de la gastronomía francesa.  Debido al reconocimiento que tenía Spurrier, su cava y su academia de vinos, le fue fácil invitar a grandes personalidades del mundo del vino en Francia.  En las invitaciones sólo se mencionó que habría una degustación de vinos californianos y nunca se dijo que serían comparados con vinos franceses de la más alta calidad.
Además de los jueces, al evento también fueron invitados un gran número de reporteros con la finalidad de dar difusión al concurso y por supuesto a la tienda de Spurrier.  Desafortunadamente para Spurrier, no hubo respuesta de los medios de difusión debido a que consideraban que la historia a la que los invitaban a cubrir no era interesante.  El resultado de una competencia entre vinos franceses y americanos era muy fácil de predecir, los vinos franceses ganarían. 


























Una vez ya llegado el Día, Spurrier desveló a los jueces la verdad. Se iban a enfrentar en la competición los Grands Crus y Premiers Crus blancos de Borgoña y Crus Classés tintos de Burdeos contra Chardonnays y Cabernets californianos.
Como señalaba el mismo Spurrier, de cara a los jueces “lo había preparado todo para que ganasen los franceses. No se pone a media docena de vinos californianos desconocidos por encima de lo mejor de la flor y nata del vino francés”.
Durante la cata, los jueces dejaron más de una perla que acabaría pasando a la historia. Destacan, entre otras, cuando un juez dijo en voz alta: “este vino es la magnificencia de Francia” y era un Cabernet de Napa Valley o cuando otro dijo “éste es definitivamente un Californiano, no tiene nariz” y era nada más ni nada menos que uno de los mejores vinos de Francia, el Batard-Montrachet ’73.








Después de la ronda de blancos, se presentaron los resultados y para sorpresa de los jueces el primer lugar era un vino californiano. 



Después de esto, los jueces estaban desconcertados y aceptaron que les costó trabajo diferenciar entre vinos de EEUU y Francia.  Después de la ronda de blancos y de un receso se inició la degustación de los vinos tintos.  Sin embargo, los jueces franceses consideraron que sería fácil diferenciar entre los vinos tintos californianos y los franceses, y pactaron entre ellos calificar alto a los vinos franceses y bajo a los vinos Americanos.  De esta manera se asegurarían de la victoria de los vinos franceses.  Sin embargo, ya iniciada la cata, Taber ( el único periodista del Time que asistio al evento) se dio cuenta de que los jueces seguían confundidos por los comentarios que hacían.
Los resultados se presentaron después de haber degustado el último vino tinto.






El resultado fue una victoria arrolladora por parte de los vinos californianos: En la categoría de vinos blancos, se consideró el vino californiano Chateau Montelena 1973 como el mejor, además de situar tres vinos californianos entre los cinco primeros.  En la categoría de vinos tintos, la victoria también se la llevó un vino californiano, el Stags Leap Wine Cellars 1973, aunque no hubo un predominio por parte de los vinos californianos.
La cata causó un revuelo muy importante en el establishment de la época. Spurrier llegó a ser considerado un traidor y la cata a ciegas le reportó muchos problemas, llegando incluso a tener que cerrar la tienda de vinos que tenía en París.

LIBRO DE FIRMAS 

   


 
 El 24 de mayo de 2006, treinta años después del “Juicio de París”, algunos de los jueces originales junto a otros nuevos se reunieron simultáneamente en Napa y Londres para catar exactamente los mismos tintos de 1976. Los críticos estaban seguros que el tiempo en botella pondría en su lugar a los californianos esta vez, que la legendaria estructura y potencial de guarda de Burdeos regresaría las aguas a su cauce… 
Ridge, Stag’s Leap, Mayacamas, Heitz y Clos du Val ocuparon los 5 primeros lugares, seguidos de los franceses Mouton, Montrose, Haut-Brion y Las Cases
Napa había triunfado de nuevo y con mayor contundencia.

¡Feliz Miércoles!
♥♥♥






10 comentarios:

  1. Jajajja bravo Chiqui, una historia maravillosa, no la conocía... y he estado indagando y... tiene película ;) Bottle Shock (2008), ya sabes le han dado su toque de Hollywood ;) y hace tiempo recuerdo haber visto Entre copas que también era de vinos, de estos vinos californianos que cuentas ;)... al grano grano, la historia me ha encantaaaado y el libro más. Un acierto total.

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    1. Ohhh Miss Moneypenny vi la película el mismo año del estreño por ansias de ver que se había hecho con esta historia. Una yankilandia! Aqui todo se ve desde los vinos californianos triunfadores.
      Sin embargo espero que la que se quedo oculta salga a la luz. Es un hito histórico lo que paso en esa cata...me encantaría poder transportarme al mismo instante que ocurrio aquello, que cambio completamente el panorama viticola. Sin desdeñar al maravilloso trabajo que hacen cada día esos maravillosos enólogos, ingenieros agrícolas y en definitivamente gente con mucho olfato.
      Alzo mi copa por Spurrier! un ingles en Francia que hizo a los franceses y al mundo pensar mas allá...


      Besos

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  2. Caramba, qué bonita historia. La desconocía por completo.
    Gracias.
    Buen día.

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    1. Preciosa!!! que emocionante mi día de hoy! merci beaucoup! decirte que tu collar azul es una auténtica pasada!!!!

      Besos

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  3. Super interesante la historia! ideal para contarla entre amigos tomando un buen vino (puede ser argentino, no?)
    beso!

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    1. Hummm muy bien! me gusta transmitir esa curiosidad que tu tienes a toneladas! por supuesto que puede ser argentino, tienes unos Malbec impresionantes!

      Besossss

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  4. Apreciadas Chiqui y Lola,que libro de firmas mas imponente,me encanta,veo que habeis vuelto con mucha energía y eso tambien me encanta!! Y en cuanto a todo el Juicio la verdad es que se pueden sacar tantas conclusiones y es tan curioso e interesante lo que nos habeis contado.....

    Un besazo grande para las dos!!!

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    1. Querida Kat,

      Son trocitos de lo que aprendimos en nuestros años entre viñedos, despues de años de aprender, catar, escuchar, aprender más...fue una historia tan bonita que me la conto alguien especial para enseñarme una lección. Nada esta escrito y todo puede ser con trabajo, teson y sobretodo con la mente muy abierta y el corazón.

      Besos

      Lola & Chiqui

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  5. Chiqui bonita historia la de los vinos...a mi me encanta el vino y como no soy experta solo se cual me gusta y cual no...sea españoles o franceses...creo que hay demasiada "tonteria" con los vinos...es bueno el que te gusta y punto...¿no?...
    Bueno lo que si es bonito es ese álbum de firmas...me encanta esa tela...
    un abrazo

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  6. Muy interesante el post!!
    Un crack el Spurrier!
    El libro muy chulo,magníficamente presentado.
    Ya está de vuelta!
    Yo pronto...
    Bss,Carmen

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